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Cómo hacer la mejor plastilina sin cocción de la historia
La plastilina sin cocción es la forma más fácil y rápida de crear un material de juego divertido, seguro y no tóxico para sus hijos, directamente en su casa. Con sólo unos pocos ingredientes domésticos comunes, puedes tener una maravillosa plastilina que dura semanas. Es una opción excelente para los juegos improvisados y los días de lluvia.
Ingredientes
- 2 tazas De harina común
- 2 cdas de aceite vegetal
- 1⁄2 taza De sal
- 2 cdas de cremor tártaro
- 11⁄2 tazas De agua hirviendo
- Colorante alimentario (opcional)
- Unas gotas de glicerina (aporta brillo y suavidad, opcional)
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Procedimiento
En un bol grande, mezclar la harina, la sal y el cremor tártaro.
Añadir el aceite y remover hasta que la mezcla parezca harina gruesa.
Si lo utiliza, añada colorante alimentario al agua hirviendo y, a continuación, viértalo en los ingredientes secos.
Remover continuamente hasta obtener una masa pegajosa y combinada.
Déjala enfriar y amásala enérgicamente hasta que se vuelva menos pegajosa y más parecida a la consistencia de la plastilina comprada en la tienda.
Si lo desea, añada unas gotas de glicerina para darle más brillo y suavidad.
Guárdelo en un recipiente hermético. Debería durar hasta 6 semanas.